lunes, 13 de junio de 2016

UN PSOE SIN TIMÓN



Según muchas encuestas, en estas nuevas elecciones que se celebrarán el próximo veintiséis de junio es muy posible que el PSOE pierda la segunda posición que actualmente tienen en el Congreso de los Diputados para pasar a tercera fuerza. Podemos se beneficiaría de este batacazo, que, de confirmarse, estoy seguro va a suponer un auténtico mazazo para aquel partido. Si esto se produjera, se daría la circunstancia de ver a Pablo Iglesias ocupando el escaño correspondiente al líder de la oposición (si es que no llegara a gobernar) y a Pedro Sánchez en mitad del hemiciclo, como un partido de segunda fila. No deja de impactarnos a aquellos que recordamos, aunque vagamente, aquel PSOE felipista al que solo la corrupción y su última crisis económica fueron capaces de tumbar y por muy estrecho margen. De no haberse producido esto, estoy convencido de que seguirían gobernando aún como gobiernan Andalucía. Pero aquel PSOE tan fuerte, a diferencia del actual, tenía un liderazgo sólido en la persona de un carismático Felipe González, y sobre todo, era un PSOE mucho más consciente que el actual de los límites que, evidentemente, no puede franquear ningún partido que tenga aspiraciones de gobierno. En el momento en que Zapatero superó esas barreras y radicalizó al PSOE en cuestiones de Estado, el PSOE dejó de ser un partido de gobierno. Su pactismo con los nacionalismos separatistas, su desacertada política exterior, y la forma en que llenó al PSOE de personajes tan endebles como Leire Pajín, Bibiana Aído y Pepiño Blanco no fueron sino el preludio de lo que una política económica de vaivenes y bandazos terminó de hundirlo. Ellos deben de comprender que Podemos no es sino el PSOE de Zapatero pero aún más radicalizado. Ellos deben de comprender que si fue este el camino que emprendieron hace unos años, Podemos lo hace mejor que ellos, porque en radicalismo, en pactismo con independentistas, en personajes y en economía socialista y de subsidio, les gana; con lo cual, la gente vota al más eficiente en esas políticas, que es Podemos. ¡Pues así se ven hoy el PSOE y Pedro Sánchez! ¡Porque no saben si quieren una España federal o en qué términos, si existe siquiera la nación española! Y desde luego, lo que no saben es si Pedro Sánchez, por todos contestado, va a ser ese líder del PSOE capaz de mantener a flote ese partido. El resultado, evidente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario